La Cooperativa Agrícola La Unión presenta este fin de semana su nuevo vino Víbelo de la mano de la chef Eva Micaela Millán, con dos actividades abiertas al público que tendrán lugar esta misma tarde y mañana sábado, en una apuesta que busca acercar un producto innovador a los nuevos hábitos de consumo y, especialmente, al público joven.
La entidad, referente histórico en la Denominación de Origen Protegida (DOP) Montilla-Moriles y en la DOP Aceite de Lucena, afronta este lanzamiento con la mezcla de expectación, orgullo y emoción acumulada tras meses de trabajo silencioso.
La iniciativa marcará un nuevo capítulo en la trayectoria de una cooperativa que, desde su fundación en 1979, ha vivido un crecimiento constante hasta convertirse en la que desarrolla la mayor vendimia de toda Andalucía, con una producción media que ronda los diez millones de litros de vino blanco, un millón de litros de vino tinto y unos tres millones de kilos de aceite de oliva cada campaña.
Ese avance continuo ha impulsado la ampliación de sus instalaciones —las de la calle Río de la Hoz, con 35.000 metros cuadrados— y ha permitido que la cooperativa supere actualmente los 1.800 socios que aportan uva o aceituna para elaborar su aceite de oliva virgen extra.
El gerente de La Unión, Francisco Fernández, señaló que el estreno de Víbelo supone “una puesta de largo muy esperada” tras un proceso de elaboración que se ha prolongado más tiempo de lo previsto. “Hemos trabajado durante mucho tiempo para tener este producto, elaborado con nuestra uva Pedro Ximénez, y queríamos presentarlo en Montilla porque es nuestra identidad”, afirmó.
La primera actividad del programa tendrá lugar esta tarde, a las 20.00 horas, con una cata dirigida en la que se compararán las características del tradicional vino de tinaja elaborado con la variedad autóctona, Pedro Ximénez, y este nuevo frizzante parcialmente fermentado.
El aforo para asistir a esta cata dirigida es limitado y las invitaciones pueden recogerse en la tienda de la cooperativa, ubicada en sus instalaciones de la Avenida de Italia, en la confluencia con las calles Burgueño, Fuente Álamo y Avenida de Boucau.
Mañana sábado, desde las 13.00 de la tarde y hasta las 19.00 horas, la actividad continuará con una fiesta-maridaje que contará con la participación de la chef Eva Millán. La cocinera, muy vinculada a Montilla y reconocida por su paso por la primera edición de MasterChef, ha diseñado un menú inspirado en sabores internacionales y pensado, de nuevo, para conectar con las preferencias de un público joven.
Millán afirmó que Víbelo "encaja muy bien con las nuevas preferencias de consumo", ya que "es un vino más refrescante y ligeramente dulce, perfecto para quienes están empezando a acercarse al mundo del vino". Para esta ocasión, la chef ha preparado una propuesta culinaria que incluye tacos, papas con mojo, fideuá de marisco y un cuscús estilo tabulé, todos elaborados con productos locales como el aceite de oliva y el vinagre de la propia cooperativa.
En este sentido, Millán destacó que Víbelo “es un vino maravilloso para el aperitivo y para compartir momentos en compañía”. Las invitaciones para esta jornada, que incluyen cinco degustaciones, pueden recogerse igualmente en la tienda de la cooperativa, y la actividad está abierta tanto a socios como a no socios.
El lanzamiento de Víbelo forma parte de un proyecto enológico más amplio que la Cooperativa Agrícola La Unión ha desarrollado durante esta vendimia y que, según sus responsables, supone un punto de inflexión en la historia reciente de la entidad.
Concebido como un vino blanco parcialmente fermentado, de estilo frizzante y elaborado íntegramente con uva Pedro Ximénez, este nuevo producto nace del deseo de adaptarse a las tendencias actuales sin renunciar a la identidad local.
“Hemos elaborado un blanco actual, cercano a las nuevas tendencias de consumo y dirigido a los consumidores que se inician en el consumo de vino, eso sí, con nuestra uva autóctona, la Pedro Ximénez”, comentó Francisco Fernández durante la presentación de Víbelo.
El proceso de creación del vino, que comenzó a gestarse a principios del verano, siguió un método minucioso que combina tradición y precisión técnica. La uva fue vendimiada en la primera semana de agosto, en su punto óptimo de maduración, para después someterse a un despalillado en blanco, un prensado a baja presión y una fermentación lenta a muy baja temperatura hasta alcanzar los seis grados de alcohol. Fernández detalló que “la fermentación se paralizó al llevar el mosto a temperaturas por debajo de los cero grados, dejándole de una manera natural un azúcar propia de la variedad Pedro Ximénez”.
El resultado es un vino joven que, en palabras del director-gerente de La Unión, se presenta “de color muy pálido, con una burbuja inquietante, persistente y sorprendente”, con aromas intensos a fruta verde y manzana que evocan la identidad de la uva local. En boca, añadió, ofrece “una explosión de sensaciones y sabores: por un lado, la burbuja justa y agradable; por otro, la acidez equilibrada y, como final, esa dulzura que nos recuerda a cuando nos llevamos a la boca una uva Pedro Ximénez”. Esa combinación hace que, a su juicio, sea un vino accesible, fresco y fácil de disfrutar: “En general nos recuerda a nuestro vino de tinaja de La Unión, pero más actual y más fácil de beber”.
La imagen del producto también forma parte del concepto que la cooperativa quiere transmitir. Con un diseño que busca atraer a nuevas generaciones, Víbelo apuesta por un estilo moderno que rompe con la estética tradicional del sector.
Francisco Fernández afirmó que “hemos arriesgado con un diseño muy atrevido donde está presente nuestra imagen como cooperativa, donde caben y están unidos los socios grandes y pequeños, y un color actual y atrayente”. El nombre, lejos de ser un simple recurso de marketing, pretende condensar una invitación vitalista. “Porque pensamos que es para vivirlo: nos recuerda la uva Pedro Ximénez y nos traslada a nuestros paseos por las viñas de Montilla y nos llevábamos uvas a la boca, y cómo no, está diseñado para beberlo”, señaló.
El director-gerente insistió en que esta nueva referencia no pretende sustituir los vinos tradicionales de la zona, pero sí ampliar el abanico de posibilidades ante un mercado cambiante. De hecho, señaló que “los vinos tradicionales de nuestra zona están en el lado contrario de la tendencia actual. Ahora se buscan vinos blancos o tintos más ligeros, de baja graduación y ligeramente dulces. Por eso hemos fermentado la uva Pedro Ximénez hasta los seis grados de alcohol y paralizado el proceso, conservando parte del dulzor natural”.
De igual modo, Fernández avanzó que este movimiento forma parte de una reflexión más amplia en la cooperativa: “Vivir y beber van de la mano con esta nueva referencia con la que Cooperativa La Unión quiere unirse a la tendencia actual del consumo”.
Víbelo ya está disponible en la tienda física de la cooperativa, en distintos comercios de Montilla y en algunos restaurantes locales. Este fin de semana, sin embargo, será su primera gran puesta en escena ante el público, en un contexto que combina música, gastronomía, tradición y un vino que nace con la vocación de sorprender y de acercar la esencia de la uva Pedro Ximénez a nuevas generaciones.
La entidad, referente histórico en la Denominación de Origen Protegida (DOP) Montilla-Moriles y en la DOP Aceite de Lucena, afronta este lanzamiento con la mezcla de expectación, orgullo y emoción acumulada tras meses de trabajo silencioso.
La iniciativa marcará un nuevo capítulo en la trayectoria de una cooperativa que, desde su fundación en 1979, ha vivido un crecimiento constante hasta convertirse en la que desarrolla la mayor vendimia de toda Andalucía, con una producción media que ronda los diez millones de litros de vino blanco, un millón de litros de vino tinto y unos tres millones de kilos de aceite de oliva cada campaña.
Ese avance continuo ha impulsado la ampliación de sus instalaciones —las de la calle Río de la Hoz, con 35.000 metros cuadrados— y ha permitido que la cooperativa supere actualmente los 1.800 socios que aportan uva o aceituna para elaborar su aceite de oliva virgen extra.
El gerente de La Unión, Francisco Fernández, señaló que el estreno de Víbelo supone “una puesta de largo muy esperada” tras un proceso de elaboración que se ha prolongado más tiempo de lo previsto. “Hemos trabajado durante mucho tiempo para tener este producto, elaborado con nuestra uva Pedro Ximénez, y queríamos presentarlo en Montilla porque es nuestra identidad”, afirmó.
La primera actividad del programa tendrá lugar esta tarde, a las 20.00 horas, con una cata dirigida en la que se compararán las características del tradicional vino de tinaja elaborado con la variedad autóctona, Pedro Ximénez, y este nuevo frizzante parcialmente fermentado.
El aforo para asistir a esta cata dirigida es limitado y las invitaciones pueden recogerse en la tienda de la cooperativa, ubicada en sus instalaciones de la Avenida de Italia, en la confluencia con las calles Burgueño, Fuente Álamo y Avenida de Boucau.
Mañana sábado, desde las 13.00 de la tarde y hasta las 19.00 horas, la actividad continuará con una fiesta-maridaje que contará con la participación de la chef Eva Millán. La cocinera, muy vinculada a Montilla y reconocida por su paso por la primera edición de MasterChef, ha diseñado un menú inspirado en sabores internacionales y pensado, de nuevo, para conectar con las preferencias de un público joven.
Millán afirmó que Víbelo "encaja muy bien con las nuevas preferencias de consumo", ya que "es un vino más refrescante y ligeramente dulce, perfecto para quienes están empezando a acercarse al mundo del vino". Para esta ocasión, la chef ha preparado una propuesta culinaria que incluye tacos, papas con mojo, fideuá de marisco y un cuscús estilo tabulé, todos elaborados con productos locales como el aceite de oliva y el vinagre de la propia cooperativa.
En este sentido, Millán destacó que Víbelo “es un vino maravilloso para el aperitivo y para compartir momentos en compañía”. Las invitaciones para esta jornada, que incluyen cinco degustaciones, pueden recogerse igualmente en la tienda de la cooperativa, y la actividad está abierta tanto a socios como a no socios.
Un interesante proyecto enológico
El lanzamiento de Víbelo forma parte de un proyecto enológico más amplio que la Cooperativa Agrícola La Unión ha desarrollado durante esta vendimia y que, según sus responsables, supone un punto de inflexión en la historia reciente de la entidad.
Concebido como un vino blanco parcialmente fermentado, de estilo frizzante y elaborado íntegramente con uva Pedro Ximénez, este nuevo producto nace del deseo de adaptarse a las tendencias actuales sin renunciar a la identidad local.
“Hemos elaborado un blanco actual, cercano a las nuevas tendencias de consumo y dirigido a los consumidores que se inician en el consumo de vino, eso sí, con nuestra uva autóctona, la Pedro Ximénez”, comentó Francisco Fernández durante la presentación de Víbelo.
El proceso de creación del vino, que comenzó a gestarse a principios del verano, siguió un método minucioso que combina tradición y precisión técnica. La uva fue vendimiada en la primera semana de agosto, en su punto óptimo de maduración, para después someterse a un despalillado en blanco, un prensado a baja presión y una fermentación lenta a muy baja temperatura hasta alcanzar los seis grados de alcohol. Fernández detalló que “la fermentación se paralizó al llevar el mosto a temperaturas por debajo de los cero grados, dejándole de una manera natural un azúcar propia de la variedad Pedro Ximénez”.
El resultado es un vino joven que, en palabras del director-gerente de La Unión, se presenta “de color muy pálido, con una burbuja inquietante, persistente y sorprendente”, con aromas intensos a fruta verde y manzana que evocan la identidad de la uva local. En boca, añadió, ofrece “una explosión de sensaciones y sabores: por un lado, la burbuja justa y agradable; por otro, la acidez equilibrada y, como final, esa dulzura que nos recuerda a cuando nos llevamos a la boca una uva Pedro Ximénez”. Esa combinación hace que, a su juicio, sea un vino accesible, fresco y fácil de disfrutar: “En general nos recuerda a nuestro vino de tinaja de La Unión, pero más actual y más fácil de beber”.
La imagen del producto también forma parte del concepto que la cooperativa quiere transmitir. Con un diseño que busca atraer a nuevas generaciones, Víbelo apuesta por un estilo moderno que rompe con la estética tradicional del sector.
Francisco Fernández afirmó que “hemos arriesgado con un diseño muy atrevido donde está presente nuestra imagen como cooperativa, donde caben y están unidos los socios grandes y pequeños, y un color actual y atrayente”. El nombre, lejos de ser un simple recurso de marketing, pretende condensar una invitación vitalista. “Porque pensamos que es para vivirlo: nos recuerda la uva Pedro Ximénez y nos traslada a nuestros paseos por las viñas de Montilla y nos llevábamos uvas a la boca, y cómo no, está diseñado para beberlo”, señaló.
El director-gerente insistió en que esta nueva referencia no pretende sustituir los vinos tradicionales de la zona, pero sí ampliar el abanico de posibilidades ante un mercado cambiante. De hecho, señaló que “los vinos tradicionales de nuestra zona están en el lado contrario de la tendencia actual. Ahora se buscan vinos blancos o tintos más ligeros, de baja graduación y ligeramente dulces. Por eso hemos fermentado la uva Pedro Ximénez hasta los seis grados de alcohol y paralizado el proceso, conservando parte del dulzor natural”.
De igual modo, Fernández avanzó que este movimiento forma parte de una reflexión más amplia en la cooperativa: “Vivir y beber van de la mano con esta nueva referencia con la que Cooperativa La Unión quiere unirse a la tendencia actual del consumo”.
Víbelo ya está disponible en la tienda física de la cooperativa, en distintos comercios de Montilla y en algunos restaurantes locales. Este fin de semana, sin embargo, será su primera gran puesta en escena ante el público, en un contexto que combina música, gastronomía, tradición y un vino que nace con la vocación de sorprender y de acercar la esencia de la uva Pedro Ximénez a nuevas generaciones.
JUAN PABLO BELLIDO / REDACCIÓN
FOTOGRAFÍA: JOSÉ ANTONIO AGUILAR (ARCHIVO)
FOTOGRAFÍA: JOSÉ ANTONIO AGUILAR (ARCHIVO)






























