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Ángel Fernández Millán | La cultura pierde impulso en Andalucía

En el momento de escribir estas líneas, en la tarde del martes 6 de septiembre de 2022, cerca de medio millar de andaluzas y andaluces han firmado ya el Manifiesto en Defensa de la Cultura Andaluza promovido desde Granada para lamentar la desaparición de la Consejería de Cultura y su transformación en Consejería de Turismo, Cultura y Deporte, con la consiguiente pérdida de impulso institucional en la legislatura de mayoría absoluta del Partido Popular.


El texto, muy ponderado en su redacción, se alarma por la reciente supresión del Centro de Documentación Musical de Andalucía, y su relegación a unidad administrativa dependiente de la Biblioteca de Andalucía. Al tiempo que recalca que “la Biblioteca de Andalucía –desde el momento de su creación hasta hoy– sigue sin tener un edificio adecuado a sus necesidades y dormita alojada en los locales de la Biblioteca Pública Provincial de Granada. ¿Cómo puede tener una “unidad” una Biblioteca que casi no existe?”.

El recién nombrado secretario general para la Cultura, con rango de viceconsejero, Salomón Castiel Abecasis, debería agendar pronto un encuentro con las organizaciones representativas del mundo de la cultura en Andalucía y cumplir así con la promesa del presidente de la Junta de Andalucía en su investidura de escuchar a todos los sectores de la sociedad civil.

No puede ser que el turismo le gane el pulso a la cultura cuando en Andalucía hay ya saturación turística en zonas del litoral y en algunas capitales de provincia. Pero, especialmente, porque el principal atractivo de nuestra comunidad es su cultura y sus señas de identidad como el Flamenco, reconocido como patrimonio intangible de la Humanidad.

La Asociación Andaluza de Profesionales de la Gestión Cultural (GECA) fue de las primeras entidades en posicionarse contra la desaparición de la Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico el pasado 26 de julio. Por otra parte, es poco coherente este retroceso administrativo de la cultura con la presentación de la candidatura de Granada como Capital Europea de la Cultura para 2031.

Andalucía no debe permitirse una segunda frustración a la hora de aspirar a una Capitalidad de la Cultura Europea como ya ocurrió con Córdoba en 2016. La cultura es una causa que debe suscitar el consenso más absoluto de toda la ciudadanía y en esa tarea todos debemos arrimar el hombro y echar a un lado los partidismos.

ÁNGEL FERNÁNDEZ MILLÁN
FOTOGRAFÍA: JOSÉ ANTONIO AGUILAR